Poner las manos en Dios tu vida, significa que ahora te sometes bajo la voluntad de Dios, es lo primero que uno hace para que su vida este en un camino correcto y pueda alcanzar las bendiciones del Santísimo Señor de los cielos.
Entender que Dios va hacer su voluntad, significa que actuará soberano en tu vida, en tus problemas.
Poner algo en las manos de Dios es permitirle al Señor que se manifieste en tu vivir diario, es aprender a vivir en el tiempo de Dios. Un tiempo que quizás a nosotros muchas veces nos cuesta entender y por eso lo que hacemos muchas veces nos sale mal, por el simple hecho que no le pedimos a Dios que se manifieste en nuestras vidas.
¿Qué puedes poner en manos de Dios?
La respuesta es muy simple, todo lo que hagas en tu vida ponlo en manos del señor, tus estudios, tu salud, tu trabajo, tu familia, tu presente y tu futuro.
Dejar a Dios que actúe implica que su favor sea para nosotros. Debemos entender que Dios no se equivoca y que todo lo que haga siempre resultará positivo para la vida que llevamos y cada promesa que ha dado para quienes temen su nombre se hará. Las bendiciones que da Dios son reales si verdaderamente estamos con ÉL.
Recordemos este pasaje de la Biblia: Dios nos es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta de lo que ha prometido (Núm. 23:19)
Dios me ayuda, Él sostiene mi alma (Sal 54:4)
Ahora dejar que el Señor te guie, significa que confiarás pase lo que pase, seguirás con ÉL, que aun así lo que tú anhelabas no se haya dado, pero confías en que el poder de Dios tarde o temprano se manifestará, que entenderás que para un Cristiano todo le sucede para bien y que aun perdiendo también ganamos. Es la Fe inquebrantable, esa Fe de Abraham, de Moisés, de Enoc y de los grandes siervos de Dios.
Camina con Fe, creyendo en el Señor y dejando todo los resultados que pueden haber bajo su voluntad, todo lo que hagas ahora confiando en Él, será lo mejor que sucederá. Deja tus inquietudes, tus temores y tus cargas en manos de Dios.
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