Chuy Olivares a través de esta reflexión Cristiana nos dice que: Muchos ministros de hoy, ministran por precio, regresan a sus casas con los bolsillos llenos, pero su espíritu vacío, porque vaciaron los bolsillos de los hermanos. Es una realidad que se vive por muchos predicadores que solo ven el evangelio una manera fácil de hacer dinero y predican solo lo que la gente quiere escuchar, como es prosperidad, bienestar, etc.
Lucran con la Palabra de Dios, pero tarde o temprano Dios ajustará cuentas con cada uno de ellos.
Darse cuenta no es difícil cuando alguien quiere engañarte
Recibir el mensaje de Dios, los milagros, así como las bendiciones es gratuito. Los ejemplos que podemos ver en la Biblia nos dan un claro entendimiento sobre los antiguos mensajeros, predicadores de Dios y los que fueron bendecidos.
Los mensajeros del ayer y los mensajeros de hoy
Los portadores de la Palabra de Dios tienen un objetivo: Que es hablar de las buenas nuevas y hacer llegar en el corazón de muchos lo que Dios tiene preparado para usted, el arrepentimiento, la salvación a través de Cristo.
Es verdad que muchos predicadores lo hacen bien y cada mensaje que transmiten lo hacen como debe de ser, sin embargo no podemos escapar a la realidad, de que puede haber siervos que hacen todo lo contrario.
Las bendiciones son regalos de Dios por tus buenas obras, por tu obediencia.
Aquí puede haber confusión en los hermanos de la Iglesia. Debemos recordar que todo lo que tú hagas es porque verdaderamente ha nacido en tu corazón, así como una ofrenda, así como la ayuda que puedes dar a tu Iglesia, a tus hermano, la solidaridad, el amor a tu prójimo s y sobretodo como es tu comportamiento ante los ojos de Dios. Todo suma para que Dios te bendiga, porque actúas correctamente.
Nadie debe imponerte nada!
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